[dropcap]E[/dropcap]n cierta manera el desnudo ha marcado la carrera de Kate Moss. Su primera portada (revista The Face, 1990), su primera gran campaña (Calvin Klein, 1992, con la que rompió con los cánones de belleza de las supermodelos), embarazada en un retrato de Lucian Freud (en 2005), para el calendario Pirelli (en 2012), o en Playboy (en 2013, en el 60 aniversario de la revista). Pues bien, la modelo ha afirmado que nunca más volverá a posar desnuda…. y que lo hará por su hija Lila Grace, que tiene 12 años.
«Lila me ha visto desnuda y fue como, Sí mamá, se ve mucho de ti en esas fotos. Vio la portada de Playboy, no vio el interior pero sabe de lo que iba la cosa», ha dicho la modelo en el diario británico The Mirror. «Son cosas con las que pienso: No voy a hacerlo de nuevo. Te pone límites».
Las declaraciones de Kate llegan poco después de que su hija confesara en un encuentro digital que en ocasiones siente que su madre le avergüenza. Lila, que nació fruto de su relación con el editor británico Jefferson Hack, ha heredado el físico de su madre y también su pasión por la moda. Aunque es poco dada a hablar de su vida familiar, Moss sí que ha contado que la maternidad le ayudó a tomarse la vida con más calma.