[dropcap]T[/dropcap]ras la noticia de que Konami cancelaba la producción del videojuego Silent Hills con Guillermo del Toro, el primero en mostrarse molesto con el anuncio parecía ser el propio director mexicano.
Tras conocerse la cancelación, Del Toro habló de lo que «podría haber sido», pero reveló que no ha «perdido la esperanza por completo» y que espera que «el proyecto se saque adelante algún día». El videojuego iba a ser una producción conjunta entre el director de El laberinto del Fauno y el desarrollador Hideo Kojima, pero debido a varios desencuentros de este último con la compañía Konami el proyecto parece haberse ido al traste.
«La colaboración entre Kojima y yo, las reuniones, y la amistad que estábamos entablando era muy bonita», dijo del Toro. «Teníamos un acuerdo sobre a dónde ir, y teníamos una idea sobre cómo íbamos a llevar el juego a las nuevas plataformas”.
«Norman Reedus (protagonista del videojuego) estaba súper feliz, Hideo estaba súper feliz, y también lo era yo», dijo Del Toro. «Sé que hay una petición en Internet y se está reuniendo firmas. Me gustaría añadir la mía, y tengo la esperanza de que alguien le preste atención”.
El director, que siempre ha tenido algunos problemas para sacar adelante sus proyectos (hay que recordar que estuvo años trabajando en una adaptación de En las montañas de la locura) estrena este año La cumbre escarlata y ya prepara la producción de Pacific Rim 2.