[dropcap]E[/dropcap]xisten dos maneras archi-conocidas de bañarte: la ducha rápida (cuando te están esperando en la puerta de la casa) y la de relajación, en la que te tomas todo el tiempo del mundo para estar debajo del agua caliente. Según Byrdie, existe una tercera manera, la ducha estratégica que aplican las editoras de belleza.
He aquí el paso a paso:
Preparación
La rutina comienza mucho antes de que el agua empiece a correr. El primer paso es cepillar el cabello mientras está seco al igual que la piel. A este último se le conoce como body brushing, permite remover las células muertas a la vez que activa la circulación. Ideal para la zona de los muslos, abdomen y brazos. ¿Por qué en seco? Primero, porque te evitas los gérmenes y bacterias de la esponjita que tienes dentro de la ducha, y en seco, los movimientos son más exactos y maltratas mucho menos la piel.
Regula la temperatura, tiempo y frecuencia
El baño diario hace más daño que bien, por lo que debes limitar el tiempo que pasas debajo del agua (menos de 10 minutos). Además, es vital que te bañes con agua tibia, esto permite que la piel mantenga su pH y elasticidad. El agua tibia es todavía lo suficientemente caliente para abrir los poros y las cutículas del pelo, pero no le quitará los aceites naturales.