[dropcap]E[/dropcap]l clan Brangelina podría dar la bienvenida a un nuevo miembro. Según ha publicado el medio australiano Woman’s Daily, Angelina Jolie y Brad Pitt estarían planenado adoptar a su séptimo hijo, un niño de dos años procedente de Siria. Angelina conoció al pequeño, llamado Moussa, durante uno de sus viajes como embajadora de buena voluntad de la ONU. Actualmente, y hasta que finalicen los burocráticos trámites de la adopción, Moussa, que ha perdido a su madre y a su padre, vive en un campamento de refugiados en Altinozu (Turquía).
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Según ha contado un trabajador de una ONG presente en el momento del encuentro, la actriz se enteró de la existencia del pequeño a través de un traductor: «Estaba muy disgustada con la historia y cuando Moussa vio que Angelina tenía lágrimas en los ojos alzó los brazos para darle un abrazo. Fue un momento muy emotivo.» La mujer de Brad Pitt «reaccionó dándole un beso en la frente y estuvieron juntos el resto de la visita».
Por el momento el matrimonio no ha hecho declaraciones sobre el tema pero, de confirmarse los rumores, Moussa sería el cuarto hijo adoptivo de la pareja, después de Maddox (Camboya); Pax (Vietnam) y Zahara (Etiopia), además de Shiloh y los gemelos Vivienne y Knox, hijos biológicos de Angelina y Brad.
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A principios del mes de enero Angelina escribió una carta en The New York Times para explicar su experiencia como embajadora de buena voluntad: «He visitado campamentos de refugiados en Irak y Siria desde 2007 y nunca he visto tanto sufrimiento como del que estoy siendo testigo en estos días. Normalmente escucho sus historias y trato de decir algo para apoyarles y mostrarles mi solidaridad. En el último viaje me quedé sin palabras».