[dropcap]E[/dropcap]l estreno de la tercera parte de Juegos del hambre generó expectativas en varios países. Las agencias internacionales reseñaron, por ejemplo, la cancelación del filme en Tailandia por las protestas políticas que hay en ese país. En Estados Unidos, además, se habla de una recaudación de 130 millones de dólares en su fin de semana de debut.
Venezuela tampoco es ajena al fenómeno de la llegada a la cartelera de Sinsajo: parte I, que se verá desde hoy en 60 pantallas en 2D de la nación. La cadena Cines Unidos informó que se vendieron, desde el pasado 7 de noviembre, más de 22 mil entradas para las funciones de viernes, sábado y domingo en las 22 salas que tendrán a disposición del público. Una cifras equiparables a preventas de las sagas Harry Potter o Crepúsculo.
Cinex, en cambio, acumulaba hasta ayer 9500 boletos. Fuentes cercanas a la exhibirdora indicaron que fue la mejor preventa del año, al superar a cintas con éxito de taquilla como Divergente, X men: Días del futuro pasado, Bajo la misma estrella y Maléfica. Cinex proyectará la película en 37 salas del país.
Con Jennifer Lawrence de nuevo al frente, la historia, más oscura, más intensa y más política que sus predecesoras, pone rostro al levantamiento de una sociedad oprimida durante décadas liderada por Katniss Everdeen, en plena transformación como icono revolucionario.
La historia, que se basa en la novela de Suzanne Collins, abandona buena parte de la acción de las dos primeras películas de la franquicia y la sustituye por una trama mucho más psicológica.
“Sinsajo I enlaza con la última parte de En llamas, donde “los personajes han quedado destrozados, incluso perdidos, e intentan recomponerse en el Distrito 13: es el principio del fin”, dijo el actor Sam Claflin en una entrevista con agencias internacionales.