[dropcap]P[/dropcap]odría ser que alguien le discutiera a Angelina Jolie su valía como actriz. Pero lo que es indiscutible es su olfato como directora, huyendo de proyectos fáciles o de guiones ramplones. Debutó con el documental A place in time, saltó a la ficción con En tierra de sangre y miel, sobre la guerra de los Balcanes, y ahora ya está montando Invencible (Unbroken), que se estrenará el 25 de diciembre, y que narra la vida de Louie Zamperini, que desgraciadamente falleció la semana pasada.
[su_note note_color=»#ffe066″]El siguiente artículo tiene contenido que puede ser considerado como SPOILER, así que hemos lo ocultado y sólo lo podrás ver si haces click sobre el texto borroso.[/su_note]
[spoiler] Zamperini ha sido una de esas personas que parecieran haber tenido las vidas de varias. Nacido en 1917 en una familia de inmigrantes italianos en Olean, en el Estado de Nueva York, a los dos años se trasladaron a California. Como ni él ni ningún miembro de su familia hablaba inglés. Zamperini empezó con el boxeo (para protegerse de los abusones) y se pasó al atletismo en el instituto. En 1934 estableció el récord escolar de la milla (marca que se mantuvo en su categoría durante 20 años). Sus éxitos atléticos le ayudaron a lograr una beca en la Universidad del Sur de California y una plaza en el equipo olímpico de EE UU en los Juegos Olímpicos celebrados en 1936 en el Berlín de la Alemania nazi, donde compitió en los 5.000 metros. Con 19 años, se convirtió en el olímpico estadounidense más joven de la especialidad hasta aquella fecha. Allí no brilló (acabó octavo en la final), pero su esprín llamó la atención de Hitler, que le saludó con la frase: “Ah, usted es el joven del final rápido”. [/spoiler]
[spoiler] Si eso valía para una película, para Zamperini no fue más que una anécdota, porque años más tarde se alistó para combatir en la Guerra del Pacífico. Fue asignado a la dotación de un bombardero B-24. El 27 de mayo de 1943 su avión se desplomó a más de mil kilómetros al oeste de las islas Hawai. Tres de los once miembros de la tripulación sobrevivieron al choque (uno murió semanas después), pero los supervivientes —que fueron dados por muertos: la familia de Zamperini recibió un telegrama de condolencia— pasaron 47 días a la deriva en una balsa. Hasta que alcanzaron las islas Marshall, donde fueron capturados por los japoneses. Les trasladaron al campo de internamiento de Ofuna, en Japón, donde pasarían el resto de la guerra. [/spoiler]
[spoiler] Acabada la guerra, Zamperini se convirtió en el alcohólico, afectado como estaba por el estrés posbélico. Lo superó y se convirtió en un conocido orador dando consejos de autoayuda. [/spoiler]
Durante décadas su vida parecía carne de cine: Tony Curtis lo manejó entre sus proyectos. Pero cuando realmente se hizo popular fue con la publicación del libro de Laura Hillenbrand Invencible: una historia de supervivencia, valor y resistencia durante la II Guerra Mundial. De esa biografía ha nacido Unbroken, el guion de Ethan y Joel Coen que ha dirigido Jolie.
En su primer trabajo, el documental A place in time, Jolie coordinó 49 equipos de rodaje para que filmaran a la vez: su intención es que quedara clara la conexión que hay entre todo el mundo. En En tierra de sangre y miel (2011), Jolie apostó por una historia sobre el conflicto de los Balcanes desarrollada en Bosnia. Y en Invencible (Unbroken) tampoco ha optado por un tema sencillo. Antes de que se estrene el 25 de diciembre te ofrecemos en exclusiva el tráiler.